9.05.2014

Perdón… #POSOYE

Que difícil es pedir perdón, a la mayoría  de las personas les cuesta mucho trabajo el que esa sencilla palabra salga de su boca. Muchas veces lastimamos a las personas que queremos, a un desconocido, a las personas con las que laboramos, pero aquí de lo que hablamos no es de cuando lastimas, sino, de cuando pides perdón.
El perdón es aceptar que fallaste, que lastimaste y que fuiste vulnerable ante un problema, pedir perdón te pone en un sitio llamado humildad, por lo mismo a la mayoría les molesta sentirse vulnerables, piensan que al pedir perdón pierden fuerza, carácter y grandeza.
Pero es al contrario, el pedir perdón llena tu cabeza y espíritu de grandeza, pues no hay nada mas gratificante que saber que la falta que cometiste te ha sido perdonada, liberas a tu cuerpo y espíritu de una carga, de un peso indeseable, ese peso es la culpa.
Sucede que las personas mas altaneras, prepotentes y groseras son las que menos piden perdón, la prepotencia crea un escudo en tu interior que impide que veas lo humano y frágil que eres, por lo mismo cubres tus imperfecciones con soberbia y esa soberbia evita que tu humildad florezca. Todos somos capaces de ofender, pero muy pocos son capaces de pedir perdón.
La convivencia crea un vinculo lleno de errores y aciertos, los aciertos se celebran y los errores se asumen, al asumir tus errores estas enseñando tus incapacidades, las cuales tenemos todos como seres humanos. Lastimamos sin intención o con el propósito de hacerlo, muchas veces la furia te lleva a ofender y lastimar a los que mas amamos, pero eso no te exime del acto de pedir perdón.
Por mucho, el pedir perdón es un acto de amor, un acto de humildad y un acto que te libera de un peso que si no lo liberas, te crea problemas en tus relaciones y en tu vida.
A todos nos han lastimado, nosotros mismos hemos lastimado, vivimos en la constante subida y bajada, en el error y el acierto, en el amor y desamor, somos vulnerables al dolor y recipientes de las mas grandes alegrías.
Han pasado personas por mi vida que no han sabido pedir perdón al lastimarme, que se van con su error y dejan en mi el mas acido de los recuerdos. Que provocaron un gran dolor y siguieron por la vida con ese cínico vale madrismo y grosera actitud. Los recuerdos se mantienen así cuando no disculpas, cuando no pides perdón, creas en el otro la imagen indeseable de ser una persona llena de soberbia y prepotencia, causando lastima y una imagen de persona non grata.
Hoy perdona, hoy pide perdón, porque tu persona dejara de cargar ese error y vivirás mucho mas ligero, llevando por la vida la imagen de un ser humano bueno, no la de un patán.
¡Vivir con perdón es vivir libre, vivir sin perdón es vivir esclavo de tus errores!
Y asi, como las nubes negras de una tormenta que ya paso,  se fueron de mi vida esas personas que no supieron pedir perdón, dejando el recuerdo amargo de su pequeñez y mostrandome la fría verdad de su prepotencia y los hilos negros de su persona, los recuerdo con una sonrisa lastimera, agradeciendo su partida y deseandoles que crezcan.


#POSOYE
 


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